Foto: cocinayvino.com / Información: Gizmodo en Español /Redacción AM Noticias

Parece "pregunta capciosa", pero en realidad no lo es tanto.

En países como el nuestro, aún podemos gozar de la experiencia de ir a "la panadería", tomar nuestra charola con sus respectivas pinzas; y escoger el surtido de pan dulce, bolillos, teleras, birotes y demás que habremos de comprar.

También es una tradición añeja que los expendios suelen darnos el producto que escogimos en bolsas de papel.

¿Pero, por qué justamente bolsa de papel y no de plástico?

La realidad es que el papel permite que entre aire en la bolsa, manteniendo el pan seco y la corteza crujiente y deliciosa.

Por el contrario, si guardas el pan en una bolsa de plástico, la humedad del pan queda atrapada en la bolsa y la corteza se ablanda.

Así que almacenar el pan en plástico mantendrá el producto fresco por más tiempo, pero perderá la corteza.

Por cierto, existen otras formas de almacenamiento, aunque más caras. Se sabe que el pan se pone rancio más rápido en el refrigerador porque la baja temperatura lo seca. Así que, si realmente te encanta el pan fresco recién salido del horno, comprar una panera de cerámica no sería mala idea.

Otra alternativa más económica: disfruta el pan fresco y, cuando te hayas saciado, corta el resto en rebanadas, mételo en una bolsa y guárdalo en el congelador para tener tostadas frescas y crujientes cuando quieras.

https://es.gizmodo.com/la-razon-por-la-que-las-panaderias-venden-el-pan-fresco-1848574758