AM Noticias | Vida y Salud

Murió Enrique Mesri, el científico argentino que fue pionero en la investigación de un tumor ligado al VIH/Sida

Murió Enrique Mesri el científico argentino que fue pionero en la investigación de un tumor ligado al VIHSida

 El fallecimiento del doctor Enrique Mesri dejó un vacío en el mundo de la ciencia, pero sobre todo en aquellos que se formaron y trabajaron junto a él. Pero también en las miles de personas que, sin saberlo, se beneficiaron de sus investigaciones. Es que, además de ser considerado como una autoridad internacional en la investigación del sarcoma de Kaposi, el principal cáncer ligado al VIH/SIDA; y recibir múltiples premios, fue su “calidad como persona” lo que más van a extrañar.

Si se tuvieran que resumir en logros objetivos, Mesri obtuvo una gran parte de estos. Tras convertirse licenciado en Química Biológica en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y realizar su doctorado en la Argentina, decidió emigrar hacia Estados Unidos para lograr más avances en la ciencia cuando nuestro país aún le era esquivo. En 2005 llegó a territorio norteamericano para realizar un posdoctorado en el reconocido National Cancer Institute de Bethesda y en el Albert Einstein College of Medicine de Nueva York.

El lugar de residencia elegido por Mesri fue Miami, la región con una mayor tasa de transmisión de VIH/SIDA en todo el territorio estadounidense y que, además, cuenta con un instituto con gran tradición en el tratamiento de esta enfermedad. Se convirtió en profesor y director del Programa de Graduados el Departamento de Microbiología e Inmunología de la Universidad de Miami y del Sylvester Comprehensive Cancer Center. Allí se consolidó como una figura relevante en el mundo de la ciencia. Aunque, si se quisiera realizar una lista de sus logros científicos, sería tan extensa que abarcaría varias páginas.

Sin embargo, unos puede indicar la clase de científico que era: fue pionero en el uso del AZT y en evitar la transmisión de HIV a hijos de mujeres infectadas con el virus. Además de liderar el laboratorio de Microbiología e Inmunología de la Universidad de Miami que realizó importantes avances en la investigación del herpes virus asociado al sarcoma de Kaposi, uno de esos cánceres vinculados con el SIDA.

Es que junto a Coso, del Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias (IFIByNE), Mesri convocó a los doctores Pedro Cahn (Fundación Huésped), Gabriel Rabinovich (IBYME) y Martin Abba (UNLP). “Estamos comprometidos a que el consorcio que formó Enrique siga teniendo aportes y siga formando recursos en Argentina, porque nos juntó para esto y tenemos que seguir consiguiendo resultados para aportar a la gente, por eso las ganas de seguir salen como homenaje a la gente, a las instituciones y a él”, señaló el investigador.

Sobre este aspecto, el de reunir a buenos científicos pero “sobre todo buena gente”, también se expresó Rabinovich: “Lo conocí en 2010 aproximadamente. Estábamos trabajando otros aspectos de las galectinas, que es nuestra área, y apareció el nombre de Enrique que estudiaba el modelo del sarcoma de Kaposi. Yo le escribí muy tímidamente, pero fue amoroso en su respuesta y muy generoso. No tengo palabras para la respuesta que tuvo, sin dudas iniciamos la colaboración, que él también empujaba y motorizaba. La verdad es que durante los años se fue gestando una amistad y una relación hermosa de colegas, tuvo una actitud fraternal y también hasta paternal”.

En palabras de este joven científico, Mesri siempre buscó contribuir con la ciencia argentina. Ya sea al conseguir la subvención NCI U54 de 2017, en consorcio con Sylvester, el Miami Center for AIDS Research y cuatro instituciones argentinas de investigación básica y clínica (tres institutos del Conicet y la Fundación Huésped) con financiación del Instituto Nacional de Salud (NHI), como en la formación de la nueva generación de científicos argentinos.

Asimismo, el científico afirmó: “Él organizó todo este trabajo y no era una ganancia económica para él, sino que era para ayudar a que la Argentina pueda progresar. Por eso, Enrique no solo formaba, sino que también colaboró con los laboratorios que estaban en Argentina”. “Siendo un argentino que estaba en Estados Unidos desde hacía años, él nunca dejó de pensar en la Argentina, apoyando la carrera de todos los jóvenes científicos que pasamos por su laboratorio, pero también intentando contribuir con que la ciencia argentina crezca”.

“Era un hombre que tenía muchísimo para dar, tenía muchas ideas, muchos proyectos en la cabeza. A pesar de su enfermedad, no pudo despegar de la ciencia y el laboratorio, que eran su vida”, dijo Álvarez Canete. Y Naipauer agregó: “No solo era un excelente científico, sino que tenía una gran calidad humana. Porque ser científico no es solo desarrollar un tema, sino también formar a científicos jóvenes para que sigan investigando, porque si no la ciencia tiene un punto final. Por eso, todos los que pasaron por su laboratorio y él fue su mentor, anhelamos ser un poco como él”.

Con información tomada de: https://www.infobae.com/america/ciencia-america/2022/08/28/murio-enrique-mesri-el-cientifico-argentino-que-fue-pionero-en-la-investigacion-de-un-tumor-ligado-al-vihsida/