Una combinación de sabrosa berenjena, queso y crema. Un fabuloso gratinado bajo en carbos que gustará por igual a los vegetarianos y a los carnívoros.

Ingredientes
900 g berenjenas
2 (220 g) cebollas amarillas
2 cda. mantequilla o aceite de oliva para freir
160 g (250 ml) queso feta o bolitas de queso mozzarella
1 cda. menta seca
80 ml (20 g) perejil fresco bien picado
110 g queso mozzarella rallado
180 ml crema (o nata) para montar
sal y pimienta

Instrucciones
Cortar las berenjenas en rodajas de 1 cm (1/2 pulgadas) de grosor.
Aplicar aceite de oliva y sal por ambos lados, asegurándose de cubrir bien la berenjena. Colocar papel para horno sobre una bandeja de horno. Hornear en ella las berenjenas, a 200°C (400°F) hasta que se doren.
Mientras tanto, cortar en rodajas finas la cebolla con un procesador de alimentos o una mandolina.
Saltear la cebolla en una sartén mediana a fuego medio hasta que se ablande, unos 5-7 minutos. Salpimentar.
Colocar una capa de rodajas asadas de berenjena en una bandeja de horno, después la mitad de las cebollas, la menta, el perejil y 2/3 del queso feta.
Añadir una última capa de berenjena y el resto de la cebolla.
Acabar añadiendo más queso feta y queso rallado por encima.
Verter la crema sobre la berenjena, el queso, la cebolla y las hierbas. Colocar la asadera en el horno a 220°C (450°F) durante 30 minutos o hasta que el gratinado esté dorado y la crema burbujee.

Consejos
¡Decóralo con perejil para disfrutar de una presentación festiva!