Fuente: Reforma

Los casos de cáncer de mama en mujeres menores de 40 años aumentaron en México, alcanzando el 15 por ciento de las 23 mil detectadas en 2016, alertó Liliana Gómez, investigadora del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBO) de la UNAM.

En Latinoamérica, hasta el 20 por ciento de las pacientes tiene menos de 44 años, casi el doble de los casos reportados en EU y Canadá, donde representan el 12 por ciento. Además, hasta el 14 por ciento de las pacientes latinoamericanas muere, cuando la cifra es de la mitad en dichos países norteamericanos, según un artículo de la revista Global Health and Cancer.

"Debemos considerar que sí existe algún tipo de riesgo. Incluso, los médicos descartan la posibilidad debido a la creencia de que a las menores de 40 años no les afecta, por eso es importante hacer la autoexploración a partir de los días 7 al 10 al fin de la menstruación, que es cuando las glándulas presentan menor inflamación de todo el ciclo", destacó Gómez.

La especialista, quien es miembro de la Unidad de Investigación en Epidemiología del Instituto Nacional de Cancerología, detalló que este tipo de cáncer entre las mujeres también es el más agresivo y, debido a la falta de una cultura de prevención, se detecta muy tarde.

Un proyecto de investigación internacional conformado por el IIBO-UNAM, el Instituto Nacional de Cancerología y el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos busca descifrar el aumento de cáncer de mama en jóvenes mexicanas.

El estudio está centrado en identificar las mutaciones genéticas en la mujer mexicana para poder diagnosticar el cáncer de forma inmediata y elaborar un protocolo de prevención primaria en sus familiares, de acuerdo con un comunicado de la Máxima Casa de Estudios.

Hasta ahora, cerca de 100 pacientes de unos 30 años han donado una muestra para que se le realice el análisis de exoma completo, que incluye 23 mil genes. Así, se secuenciarán todos los genes que codifican proteínas en su genoma.

Primero, se estudiarán 96 genes asociados con síndromes de cáncer hereditario; después, las variantes poblacionales de riesgo en genes involucrados en vías de respuesta inflamatoria; y finalmente, se analizarán los que tienen intervienen en el metabolismo de los fármacos oncológicos para evaluar la respuesta al tratamiento en diferentes perfiles genéticos.

Con esto, en un futuro podrían brindar una atención personalizada a cada mujer y actuar de acuerdo a sus necesidades.

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